Para hacerse una limpieza facial con poco dinero y sin someter el cutis a productos químicos, los productos caseros pueden servir para lucir siempre espectacular, joven y saludable.

Antes de usar cualquier producto, es fundamental lavarse la cara con abundante agua tibia y un gel limpiador adaptado al tipo de piel. De esta forma, el cutis quedará libre de impurezas y residuos que puedan perjudicar la efectividad de los productos caseros que, a continuación, se utilizarán en el tratamiento de limpieza facial.

 El aceite de oliva es uno de los mejores productos caseros que existen para obtener una limpieza facial extrema. Además de remover impurezas, deja la piel mucho más tersa, suave y radiante. Este preciado líquido dorado, es un efectivo desmaquillante natural, por lo que también ayuda a eliminar todos los restos de maquillaje acumulados en el rostro. 

Seguidamente de esto, un buen exfoliante para el rostro, ayudará a mantener una piel limpia, tersa y libre de células muertas. Una buena opción es, preparar una loción exfoliante casera a base de miel y azúcar; mezclando estos dos ingredientes, se obtendrá una pasta que puede ser aplicada sobre la cara, mediante movimientos circulares, para dejarla mucho más suave y bonita.

Una vez aplicado este exfoliante, hay que enjuagarse la cara con agua tibia; se aconseja realizar un ligero masaje regenerativo. Con este, se reactivará la circulación sanguínea del rostro, contribuyendo a su firmeza y tersura.

Acompañarlo con unas gotas de aceite de rosa mosqueta, o con aceite de almendras; la experiencia resultará muy placentera.

Se puede continuar el proceso de limpieza, con la aplicación de una buena mascarilla hidratante para el rostro. Son muchas las preparaciones caseras que le devolverán al cutis una vitalidad increíble, pero algunas de las más efectivas son las que se elaboran a base de ingredientes como la miel, el huevo, la avena, la levadura de cerveza o el limón.

Finalmente, para completar esta limpieza facial con productos caseros, se pueden aplicar bolsas de té verde frías para cerrar los poros abiertos de la cara. Al terminar; aclarar con agua tibia, y proceder a usar el tónico facial habitual y crema hidratante. Con todo ello, la limpieza facial con productos caseros será igual de efectiva que una limpieza de cutis profesional.