Esta terapia trabaja a base de frío, y le da diferentes beneficios al cuerpo y la salud.

Existen muchas técnicas en el mundo para tratar ciertos problemas de salud como: la artritis, el sobrepeso, el insomnio o la diabetes. Pero hay una que destaca por encima del resto: la crioterapia corporal.

Se dice nació en el continente asiático, particularmente en Japón en 1978, gracias al doctor Yamaguchi, quien la desarrolló para tratar a sus pacientes en forma integral. Se utilizan terapias de frío de cuerpo entero, para tratar enfermedades inflamatorias y dolorosas, como la artritis.

La crioterapia de cuerpo entero, se basa en la exposición del cuerpo a muy bajas temperaturas, durante un breve periodo de tiempo (la exposición dura aproximadamente unos 3 minutos). Esta técnica aporta beneficios en la superficie corporal, y llega hasta los tejidos más profundos: de ahí sus grandes beneficios.

Durante estos minutos, la persona no sufre. Al contrario, tiene una sensación agradable, porque nuestro organismo libera endorfinas para nuestro bienestar. El frío tiene un efecto tensor sobre la piel, al estimular la contracción de sus fibras elásticas, y sobre el metabolismo de la grasa, ya que estimula mecanismos que intentan elevar la temperatura en la zona tratada, lo que conduce a una eliminación más rápida de las toxinas, y a una tonificación de los tejidos.

El descenso de la temperatura puede ayudar a mejorar el contorno de aquellas zonas del cuerpo en las que se acumula la grasa no deseada, como: los glúteos, las caderas o el abdomen.

Los beneficios que ofrecen las sesiones de crioterapia son muy variados, algunos de los más importantes son:

·Ayuda a bajar de peso.

·Mejora la apariencia del rostro y aminora machas en la piel y acné.

· Es aliado en los problemas de  migraña e insomnio.

·Colabora en tener una mejor circulación sanguínea.

·Reduce la inflamación.

·Disminuye el estrés y la ansiedad.

·Mejora el estado de ánimo y mitiga la fatiga.

·Ayuda en enfermedades como: fibromialgia, artritis, esclerosis  múltiple.

· Inhibe las várices.

·Acelera el metabolismo, y genera un boost de energía.

·Es una gran alternativa para el dolor crónico y procesos de recuperación.