Reducir 30% el costo y el tiempo de construcción con prácticas sustentables es posible con los ladrillos desarrollados por EcoLadrillos México, una empresa creada por dos jóvenes mexicanos.
Una vez más el ingenio mexicano destaca a nivel internacional en esta ocasión através del talento y la dedicación de mentes jóvenes y emprendedoras que además de ofrecer un producto innovador también aportan con una nueva forma de fabricar ladrillos de manera ecológica y económica.
Estos dos jóvenes mexicanos marcaron la diferencia al fabricar ladrillos a base de tepetate, cemento ecológico y agua de lluvia mediante una maquina para ladrillos y luego exponiéndolos al sol así eliminando la cocción en hornos, que contamina mucho la atmosfera, lo que reduce la emisión de CO2.
Cada bloque cuenta con dos orificios, donde se introducen los cables del sistema eléctrico, teléfono, Internet e, incluso, la instalación de tuberías, con lo cual evita raspar o romper la pared para hacer dichas instalaciones.
También cuentan con medios ladrillos, para evitar que al llegar a un extremo de una barda se tenga que romper una pieza y desperdiciar la otra, además de otros en forma de “U” con los que se pueden armar los castillos y trabes sin utilizar una cimbra de madera.
El producto fue el resultado de un proyecto de incubadora de negocios de la UNITEC y posteriormente ganó el Premio Global al Emprendimiento James McGuire, en Orlando Florida, en la categoría de Graduados.
Con los 50 mil dólares que ganaron al recibir el Premio Global al Emprendiento iniciaron la producción en masa de los Ecoladrillos. A la fecha tienen la capacidad de fabricar tres mil 500 piezas al día.
Ahora planean presentar su producto al Gobierno de la Ciudad de México para que el Instituto de Vivienda del DF (INVI) utilice sus ladrillos en la construcción de casas de interés social. El objetivo final, que los EcoLadrillos formen parte de la cultura arquitectónica de todo el país.