Perfectamente visible desde el espacio, este fascinante complejo de corales, Patrimonio de la Humanidad, alberga bajo aguas transparentes un mundo inimaginable de formas y colores.
La Gran Barrera de Coral australiana es el equivalente oceánico a la selva amazónica. Se extiende a lo largo de 2.300 kilómetros y constituye la mayor estructura jamás construida por seres vivos. Lo mismo que la Gran Muralla China, es perfectamente visible desde el espacio. Su superficie, mayor que todas las Islas Británicas, está compuesta por casi 3.000 arrecifes distintos. La vida que contiene este formidable complejo de corales es inimaginable; su colorido, belleza y variedad de formas, insuperable. Desde 1981 considerado Patrimonio de la Humanidad y debidamente protegido para que su delicado equilibrio no se vea afectado por la acción del hombre.
Equivocadamente muchos piensan que la barrera es continua, pero no es. Son formaciones coralinas con varias formas diferentes unas próximas de las otras, pero que en la mayor parte no se tocan y muchas veces están incluso a decenas de kilómetros una de la otra. La Gran Barrera tampoco es constituida de una única hilera. Existen 3 líneas bien distinguidas. Esas hileras de corales aparecen y desaparecen, o desaparecen por completo en la medida que alcanzan aguas más frías para el Sur, cerca de la ciudad de Bundaberg.
El crecimiento de los Corales es afectado por varios factores. Uno de ellos es la temperatura del agua, el otro es el PH y salinidad. Por eso ninguna parte de la Barrera podría ser continua, pues el agua dulce de ríos que desaguan en el mar no permite que los corales crezcan en esas áreas (esas zonas son llamadas de Pases). La Gran Barrera se queda enteramente en el estado de Queensland, y adquiere varios nombres de acuerdo con la sesión. Por ejemplo: Capricorn Session, que obviamente se queda en la altura del Trópico de Capricornio, North Session enfrente de Cairns, y Whitsunday Session enfrente las islas Whitsundays, y así por toda la extensión.
La Barrera forma también muchas islas, siendo que una buena parte de ellas hoy abriga resorts maravillosos o son completamente desiertas. Es posible acampar en alguna de ellas con autorización del departamento de Conservación, pero es preciso llevar todo lo que va a usar, principalmente agua, comida, y protector solar.