Viajar es siempre una experiencia maravillosa, pero a veces el tema económico puede impedirnos  planear unas buenas vacaciones.

Cuando pensamos en verano automáticamente lo relacionamos con vacaciones, pero no siempre podemos permitirnos pagar un viaje a un destino exótico o unas vacaciones de lujo. Pero eso no debe impedirnos disfrutar del verano, puesto que hay muchas cosas que se pueden hacer gratis o a bajo coste.

• Planifica y olvídate de los intermediarios, cuando buscas con algo de anticipación puedes conseguir realmente buenos precios en vuelos y hospedajes, pero si quieres ahorrar debes hacerlo tu mismo. Métete en las principales aerolíneas low cost, utiliza la herramienta de fechas flexibles y planea tú mismo el tour que deseas hacer, así dejaras de pagar las comisiones que ganan las agencias de viajes.

• Te recomendamos que tu escapada sea a un lugar cercano para poder aprovechar al máximo la estancia y no gastar tu tiempo en los desplazamientos. Es muy recurrente hacer viajes en coche para poder tener libertad en todo momento y ahorrarnos los desplazamientos desde el aeropuerto o demás estaciones.

• Aprovecha los parques más cercanos a tu casa para tomar el sol y disfrutar del buen tiempo. No gastarás más que el dinero del transporte, pero volverás a casa cargado de buena energía gracias al sol.

• Flexibiliza tus itinerarios, es bueno conocer puntos turísticos importantes, pero en muchas ocasiones las ciudades ofrecen interesantes propuestas totalmente gratuitas y altamente culturales, como conciertos en la calle, exposiciones en lugares públicos, entre otras cosas, nuevamente investiga un poco y verás que podrás conocer mucho saliéndote de los lugares comunes y sin gastar una fortuna.

• Otra solución para disfrutar del verano sin gastar mucho dinero es acampar. No solo es más barato que un hotel tradicional cuando te vas de viaje sino que además es una experiencia completamente diferente, que permite exprimir al máximo el buen tiempo veraniego.

• Recuerda que para disfrutar de la playa no necesitas una semana. Puedes ir a pasar solo el día a la playa, con lo que gastarás mucho menos dinero en hoteles costosos sin perder lo mejor de la experiencia. Si no vives cerca del mar, busca un río, una playa fluvial o un buen lago para pasar allí el día.

• Deberás tratar de buscar las opciones más económicas, comparar todas posibilidades y tratar de aprovechar al máximo tu viaje, que aunque sean pocos días pueden rendir mucho.